Después del contrato firmado por Alberto Fernández que modificó algunos términos de la ley que establecía los parámetros para la compra de vacunas, la Argentina suscribió un acuerdo con la compañía Moderna Inc. por el suministro de 20 millones de dosis contra el coronavirus.
Se trata del primer contrato que permitirá recibir vacunas basadas en la plataforma ARNm y las mismas estarían disponibles para nuestro país a partir del primer trimestre del 2022. Además, habilita la posibilidad de obtener durante este año una donación de dosis de parte de Estados Unidos.
Sobre esta misma situación, la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, expresó que “estamos dando un paso clave en nuestra estrategia de contar con todas las plataformas tecnológicas posibles, mientras continuamos las gestiones con otros laboratorios”.
La vacuna de Moderna ha demostrado una eficacia superior al 90%, con adecuado perfil de seguridad, lo que explica su autorización de emergencia para el uso en personas de 18 años y mayores por parte de las agencias regulatorias de más de 50 países, y que se encuentre en la Lista de Uso de Emergencia (EUL) de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En cuanto a las características de almacenamiento, también se asemejan a las que ya se utilizan en nuestro país. Por lo tanto, eso significa una ventaja desde el punto de vista logístico, con lo cual, una vez recibida, puede ser distribuida y estar disponible para su uso casi en forma inmediata.
Por otra parte, la vacuna ARNm propuesta para su uso como refuerzo, tiene carácter universal y multivalente. Con este último acuerdo rubricado, Argentina se constituye en el cuarto país del mundo, detrás de Suiza, Australia y Estados Unidos, además de la Unión Europea, en asegurarse la posibilidad de contar también con refuerzo.