El referente de la lista de Juntos con representación de la Unión Cívica Radical logró imponerse en la interna de una manera muy ajustada con el resto de los competidores. Aun así, se ganó el lugar para ser la cabeza de la lista que será parte de las elecciones generales del 14 de noviembre próximo, aunque dentro del espacio hay mucho malestar.
En las PASO, Gonzalo Diez triunfó tras obtener 5748 votos (el 28,9% de la interna); mientras que la de la concejal macrista Eugenia Vallota, con 4914 votos (24,71%) quedó segunda; la de la edil Graciana Maizzani Haro, también de la UCR, con 4900 votos (24,64%); y por último José María Dodds (PRO), con 4324 votos (21,74%).
La política necochense es un hervidero, con pases de un espacio a otro y discusiones continuas. Anteriormente, Diez había sido precandidato a intendente, pero perdió en la interna contra el actual jefe comunal, Arturo Rojas, con quien antes compartían la misma alianza, hasta que Rojas decidió pegar el portazo y planificar su propio armado.
Este año volverá a ocupar una banca el Concejo Deliberante local, donde ya estuvo durante ocho años, con dos períodos consecutivos entre 2007 y 2015, con una participación que prácticamente pasó desapercibido, por lo que su intención sería seguir viviendo del Estado.
De todos modos, lo que pocos saben son algunas de sus maniobras espurias en relación a sus ingresos, sus gastos y sus puestos laborales. Actualmente el referente de Dar el Paso y aliado de Facundo Manes tiene un puesto en la Defensoría del Pueblo, por el cual percibe como salario una suma de $103.000.
Además, está inscripto en la AFIP, como persona física, como servicios de productores y asesores de seguros, actividad con la cual se dio de alta en el 2013 pero lo curioso es que desde el año 2018 no presenta ni facturaciones ni balances. Este dato será fundamental para intentar entender sus gastos, teniendo en cuenta que son exorbitantes.
Diez se encuentra como deudor, registrándose en tres bancos distintos (Banco Santander, Banco BBVA Francés y Banco Macro). Sin embargo, lo que llama la atención es la enorme cifra que debe, que llega a los $952.000, muy por encima de sus posibilidades económicas y varias veces más de lo que recibe por su trabajo.
Pero como si todo esto fuera poco, cuenta a su nombre con tres vehículos que también tienen su elevado costo de mantenimiento. Uno de ellos es un colectivo marca Mercedes Benz modelo 2015, otro Ford Focus y por último un Chevrolet Astra que, entre patente, seguro y demás, suman todavía mucho más dinero a sus gastos mensuales.
Además, el candidato de Juntos se encuentra como deudor en ARBA en situación 3, con montos superiores a los $10.000 y a punto de ingresar una instancia judicial que podría avanzar con la inhibición de algunos de sus bienes hasta que regularice sus compromisos.
De todos modos, sus complicaciones financieras no se agotan allí, ya que Diez también tiene un juicio en su contra que fue iniciado por la AFIP por ejecución fiscal, que comenzó en 2019 y lo tramita el juzgado federal de Necochea, algo que terminó con un embargo por $125.000.