Un viejo inmueble en las inmediaciones de la plaza Paso de La Plata se convirtió en una atractiva propuesta gastronómica, en medio del auge del vino por copa (uno de los pocos lugares que lo ofrece en la ciudad) y la apertura de espacios de placer para todas las edades, aunque con evidente espíritu joven.
Ubicado en 11 entre 43 y 44, “Casa tomada wine bar” es una idea de un grupo de emprendedores, creadores de una de las organizadoras de eventos que es tendencia en la ciudad desde hace algunos años.
Cómo lo describe la leyenda en sus redes sociales, Casa tomada, “Vino para quedarse”…, que también podría traducirse en “para tomar como en Casa”, en otro antojadizo juego de palabras.
Al ingresar a la antigua casona, que combina en total armonía coloridas paredes con muros descascarados, un cálido hall es el escenario de bienvenida. Con dedicada atención del personal, el cliente puede optar por cenar o “picotear” en un distinguido living con sillones estilo Chester, ubicarse en algunas de las mesas del patio principal semiabierto, o mudarse en “modo relax” al sector de la amplia barra, un ambiente distendido en el que se puede disfrutar de un trago, un vino por copa (con surtida carta varietales y etiquetas de todas las gamas) para acompañar alguna de las opciones de la carta en un plan más descontracturado.
No se ofrecen menúes tradicionales al plato pero la amplia variedad y calidad de tapas compensa cualquier ausencia. La oferta de postres también es tentadora y a la carta de vinos, tragos, aperitivos y destilados no le falta nada de lo que se pueda elegir para paladear. Las mesas se ocupan por orden de llegada, sin reserva previa.
La carta gastronómica y de bebidas puede descargarse con anticipación desde el IG @casatomadawinehouse (con precios incluidos) o escanearse en el lugar con código QR. El servicio se puede abonar con cualquier medio de pago, una ventaja destacable.
Calidez, ambientación inmejorable, buena atención y precios más que razonables, son argumentos suficientes para recomendar visitar un wine bar que se impone como punto de encuentro.