La senadora bonaerense por el Frente de Todos, María Teresa García, reconoció que la inflación es el mayor flagelo que sufre la población y denunció que es consecuencia del acuerdo con el FMI. Sin embargo, omitió responsabilizar a la gestión de Alberto Fernández.
En declaraciones radiales afirmó que “la manifestación más importante fue la que se realizó en Plaza de Mayo, que fue convocada por el justicialismo bonaerense, un sector de la CGT, la CTA y otras organizaciones gremiales y sociales”.
La presidenta del bloque oficialista en la cámara lata señaló que allí “el mensaje fue claro y lo dijo Máximo Kirchner: no se puede seguir castigando a los trabajadores”, por cuanto “la inflación es el mayor flagelo que tienen y es producto del acuerdo con el FMI. La gente está muy mal, incluso la que tiene trabajo formal”.
Además, celebró el anuncio de “la adjudicación de un bono para aquellos que no tienen ningún programa y tienen que sobrevivir diariamente”, así como “el aumento del piso de ganancias porque muchos trabajadores terminaban casi perdiendo el valor de su salario en el pago de ese tributo”. Consideró que “no hay que dejar de advertir” sobre la situación porque “lo peor que le puede pasar a la dirigencia política, al peronismo y a la sociedad, es el silencio, porque enmascara”.
La legisladora aclaró que “no hubo un mensaje direccionado al Presidente. Fue una advertencia porque la gente la está pasando muy mal con la inflación” y aclaró que “esto viene ocurriendo desde hace más de 2 años”, por lo que “no es responsabilidad de (Sergio) Massa”.
Al ser consultada por el acuerdo con FMI y la posibilidad de nuevas medidas redistributivas, enfatizó que “van a tener que ser posibles” y llamó a “rediscutir” las metas con el organismo porque “va a seguir presionando, sobre todo con el aumento de tarifas” mientras que “nosotros tenemos que tener audacia porque los muertos no pagan”.