La actividad industrial de las pymes cayó un 19% interanual en mayo, acumulando una retracción del 19,1% en los primeros cinco meses del año. Los empresarios reclaman medidas urgentes del Gobierno para enfrentar la falta de ventas y los altos costos de producción y logística.
La actividad industrial de las pequeñas y medianas empresas (pymes) cayó un 19% interanual en mayo, acumulando una retracción del 19,1% en los primeros cinco meses del año en comparación con el mismo periodo de 2023. En medio de esta crisis, los empresarios exigen al Gobierno medidas concretas para el sector.
El Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) reveló un debilitamiento significativo de la demanda y un deterioro financiero en las 414 compañías encuestadas.
Todos los sectores manufactureros incluidos en el informe mostraron caídas, con “Papel e Impresiones” y “Químicos y Plásticos” siendo los más afectados, con descensos del 45,8% y 23,9%, respectivamente. Incluso el sector de “Textil e Indumentaria”, que había mostrado crecimiento hasta abril, retrocedió un 4,3% en mayo.

A pesar de cierta estabilidad en los precios de los insumos durante mayo, los empresarios manifestaron su preocupación por los altos costos de energía y transporte en un contexto de baja demanda. Un 34,4% de las pymes encuestadas reportaron recortes en gastos operativos y un 19,9% redujo las horas de trabajo debido a la falta de ventas.
Los mayores desafíos identificados por los empresarios son la escasez de ventas (45,1%) y los altos costos de producción y logística (32,8%). En respuesta, las pymes solicitan al Gobierno la implementación de políticas específicas, destacando la necesidad de una reducción de impuestos (33,9%), estímulo a la demanda interna (14,7%) y adecuación de las relaciones laborales (14,2%).