En medio de una crisis socioeconómica muy fuerte donde la pobreza aumenta y las condiciones de vida se deterioran cada vez más, el Ministerio de Justicia de la Nación a cargo de Mariano Cúneo Libarona cerró los Centros de Acceso a la Justicia de los barrios populares porteños.
Estos centros son dispositivos territoriales que buscan extender los servicios de asistencia legal gratuita y mejorar la situación de acceso a la justicia de la población más vulnerabilizada.
En la ciudad existen dieciséis centros de los cuales el gobierno decidió cerrar ocho. Lo único que parecen tener en común los centros cerrados es que se encuentran en barrios populares.
”Los centros cerrados recibían un alto número de consultas, no parecían tener menor cantidad que otros centros que no fueron cerrados. Los temas principales tenían que ver con documentación personal y temas de familia”, sostuvo Guillermina Greco, abogada y coordinadora del programa Acceso a la Justicia de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), en base a un pedido de información pública que realizaron desde ACIJ.