En la capital de la provincia se empieza a palpar el clima electoral que, debido a las circunstancias de la pandemia, tiene todavía un sabor atípico y una demora inédita en la rosca política. Con la confirmación de la postergación de las PASO, también se pospusieron las negociaciones, aunque en el submundo dirigencial la rueda nunca se detiene.
En el marco de las aspiraciones para las elecciones legislativas de este año, por cuestiones lógicas, quienes están más turbulentos son los integrantes de la oposición, que pasaron de conducir los tres bastiones más importantes a tener que conformarse solamente con la Ciudad de Buenos Aires y algunas intendencias bonaerenses.
Desde el oficialismo ostentan la tensa calma de estar en gestión tanto en la provincia como en Nación, aunque todavía sin poder pisar fuerte en CABA, una jurisdicción históricamente esquiva para el peronismo. Sin embargo, los comicios de medio término serán fundamentales para el Frente de Todos si el anhelo es llegar al 2023 con el mayor grado de gobernabilidad posible.
En este panorama, la interna de Juntos por el Cambio asoma, por ahora, como la más feroz. Entre los halcones y las palomas, la disputa es cada más intensa, los cruces públicos ya no se ocultan y la disputa está enfocada más en lo que suceda en la Capital Federal que en lo que pueda suceder en el territorio bonaerense tras la estrepitosa derrota del 2019 que aún dejó heridas sin cerrar.
Descartando el distrito gobernado por Horacio Rodríguez Larreta, con el correr de los días, uno de los municipios donde poco a poco comenzó a sentirse el tubillo electoral es La Plata. Hace algunos días ya comenzaron a vislumbrarse los primeros pasacalles en la ciudad de las diagonales y uno de los que asomó tímidamente fue el diputado nacional Cristian Ritondo.
El ex ministro de Seguridad, del riñón de María Eugenia Vidal, tiene aspiraciones grandes para el 2023 y lanzó su campaña para gobernador con carteles que llevan la firma de Juventud ProTagonista, el espacio de militantes que lo apoya. Pero ese objetivo no será fácil, ya que tendrá que competir fuertemente con otro de los sectores opositores como el Grupo Dorrego.
La congregación de intendentes de Juntos por el Cambio apuesta a que sea uno de los jefes comunales que están bancando la parada durante la gestión de Axel Kicillof el que encabece la lista para gobernador. El líder de la tropa es el alcalde de Vicente López, Jorge Macri, quien se compró todas las fichas para apostar a ser él quien finalmente quede como candidato al sillón de Dardo Rocha.
Uno de los que forma parte del grupo es Julio Garro, intendente platense que en dos años se le vence su mandato y no podrá renovarlo, al igual que muchos de sus compañeros de espacio. Si bien sus posibilidades de trepar hacia provincia son pocas, podría apoyar las aspiraciones de Macri con el afán de quedarse con algún ministerio en la repartija de un futuro Gabinete.
En ese marco, La Plata también se convirtió en una arena de lucha de cara al 2023 en búsqueda de la sucesión de Garro. Quien dio el puntapié inicial en la campaña fue el diputado provincial de Juntos por el Cambio, Daniel Lipovetzky, que como parte de su estrategia pegó carteles en distintos comercios, confrontando y culpando a Kicillof por el cierre de los mismos.
Pero no solamente la oposición tiene el anclaje en la capital bonaerense, sino que también desde el Frente de Todos comenzaron a emerger algunos nombres para las listas de las legislativas. En ese marco, el corrillo político crece y la principal apuntada para encabezar sería la concejala y titular del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, Victoria Tolosa Paz.
La edil platense es del riñón de Alberto Fernández, integra el Grupo Callao y a pesar de haber sido derrotada en las internas de 2019 por la legisladora provincial Florencia Saintout, el presidente pujaría para que sea la mujer de Enrique “Pepe” Albistur, quien esté al frente de la lista de diputados nacionales por la provincia de Buenos Aires, un premio demasiado alto para su corta trayectoria.
Se sabe que Tolosa Paz ambiciona con ser intendenta de La Plata y para sus ansias, las legislativas de este año serían el trampolín que necesita para acumular más poder. Sin embargo, en el medio está La Cámpora, sector representado por Saintout, que no estaría dispuesto a ceder la conducción territorial tan fácil y, en caso de que la ex decana no compita, buscarían otro nombre.
